martes, 4 de diciembre de 2012

PAREJAS


Hace poco he pasado por varios fines de semana familiares. Familiares me refiero a familias junto a familias. Es decir, convivir con otras familias con infantes. Te das cuenta de que cada pareja es diferente y no sólo eso, sino que la pareja que tú conocías como pareja ya no es esa pareja. Y es que un niño pone a prueba de bomba las relaciones. De ahí que te siempre aconsejen: “no tengas un hijo para rehacer tu relación de pareja”. Y es verdad, porque lo que haces es rematarla.

Tengo una amiga, que su relación de pareja era ideal. Ganaban más que de sobra, vivían a todo tren, se entendían, se reían…y de golpe, en cuestión de un año, ha pasado a ser madre soltera. Sí, su marido le empezó a ser infiel, ella se enteró y ala, con un niño de un año a vivir sola, por y para su hijo, con una depresión de caballo, con la sola ayuda de su madre y con los problemas y dolores de cabeza que comporta un divorcio. Olé tú!

Otra, tenía un matrimonio estable con una hija mayorcita, con la crisis del bebé superada y de golpe se queda embarazada de su segundo hijo en edad avanzada y vuelve el caos. Porqué vuelve el caos? Porque ya no tiene la fuerza y paciencia de los 30, la echan del trabajo, el matrimonio está más gastado pero, en este caso, la infiel es ella. Con un par!

Otra de mis amigas tenía una buena relación con su pareja. Normal, sin altos ni bajos. Y de golpe, con el bebé en casa, ya no se habla con su marido. Sólo para cuestiones del niño pero ya está. Ni un qué tal, ni un cariño, nada…

También conozco el caso de una amiga con una buena relación con su pareja que tras 10 años de familia decide separarse pero sigue viviendo con su marido, del que está separada, con tal de que el niño no sepa que sus padres ya no se quieren. Eso y la crisis, claro.

Ah bueno! Luego tenemos las cosas tipo Lara Dibildos que da a luz a un niño y al mes se divorcia. Y lo ha hecho 2 veces! Cosas de la vida.

A veces me pregunto si estas relaciones no eran tan perfectas como se veían o pensaba, o incluso pensaban ellos, y que todo estalla al nacer un bebé porque cambia todo tu mundo. Pero lo que sí es cierto es que, por mucho que tu relación sea estupenda, un hijo la desgasta a niveles insospechados.

Intento pensar que la mayoría de parejas se distancian durante 2, 3, 5 años, aguantan como buenamente pueden, discuten mucho y, poco a poco, se va normalizando todo hasta llegar a una pareja estándar, la de tus padres vaya, pero que la relación de pareja como la entendíamos con esa persona ya ha variado, ha cogido otro rol y no volverá a ser igual.

La verdad que no conozco parejas que al cabo de mucho tiempo y tras un o varios partos tengan una relación de novios. Bueno de novios, de pareja soltera. Que en parte es lo que toca porque ya no vives por y para la pareja sino que vives para lo más bello que puede hacer una pareja que se quiere, unirse al máximo para crear un ser humano.

En una charla de Carlos González sobre crianza, obviamente era otro contexto, dijo una frase que podría trasladar aquí: “cuando uno tiene pareja nadie le dice que haga vida de soltero”. Supongo que una vez tienes un hijo es ridículo plantearse una vida de pareja como la entendíamos, no tiene sentido. Haces vida de padre y madre y empeñarse en tener una relación como antaño es esforzarse en conseguir algo prácticamente imposible porque las normas ya no se pactan entre 2 sino entre 3, y no veas el tercero como dirige!!!!


Así que, las que tengan una relación excepcional, perfecta, de enamorados de 15…que la aproveche y no deje nunca a su marido y las que no, pues que se conformen con querer a su pareja, que la quieran y compartir los bonitos momento que te da la familia. Para las que no tengan nada esto….pues el divorcio y liarla parda por la noche ;)

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